Léelo y quédate conmigo


En una tierra extraña compartí la mesa con dos águilas, una más grande que la otra, ambas bellas y fuertes. Verlas comer y conversar sobre ellas mismas, me recordó el viaje que me trajo a encontrarme con ellas. Habría sido yo quién deseo mantenerme con vida para ser protagonista de un momento con la misma intensidad, junto a quién hubiera elegido.

¿Quién era yo en ese momento?, ¿Acaso una caricatura mal dibujada?, ¿Acaso un fracaso?, ¿Acaso alguien mejor? 

Estuve viajando por abajo y por arriba, buscando respuestas con la tinta negra de mi cabello, y hoy solo quiero ser como esa águila que viaja confiando en su compañera. 

No importa quién viaje más alto, solo quiero ir confiando en mis alas, en ti, en que seguimos vivos después de tanto desinterés, después de tanta agua.

Después de todo, mucho o poco nos diferencia, yo soy fuerte como esa águila. 

Y a simple vista me parece que somos fuertes, que podemos ir juntos a dónde consideremos que podemos llegar. Y volar hasta reconocer que el Karma me cobro pendientes.

En el límite, llorando mis decisiones, sabré que debo hacer por qué una década mas tarde ya no hay miedo.


Léelo y quédate conmigo. 

Comentarios

Entradas populares